RECOMENDACIONES POSTERIORES AL PARTO / CESÁREA

¡ Ya nació !

El  nacimiento del  bebé es  la culminación  de los  9 meses de  espera y da inicio a la trascendental tarea humana: Ser Padres.

Todo  lo que  suceda después  deberá hasta  cierto punto, girar  alrededor de ese acontecimiento.

Durante  la primera  semana es  conveniente que  realice paseos  cortos  alternados con periodos de descanso siempre que el bebé  duerma.

Es  posible  que haya  leído  todos los  libros  escritos sobre  RECIEN  NACIDOS, pero ningún  libro contiene información acerca  de  su propio bebé y no existe un camino fácil para aprender la  rutina de cada niño.

Es pues un error tratar de imponerle un esquema; en realidad es  usted la que debe adaptarse a sus necesidades.

La  mejor  forma de  enfrentarse a  todas estas  exigencias sin  perder  el buen humor y logrando suficiente reposo, consiste en  responder al ritmo del bebé.

Tendrán  que aprender a dormir siestas  cortas por que quizá la única  oportunidad que  tenga para dormir  durante los primeros días sea mientras EL duerme.

Debido  a la suspensión repentina de las hormonas del embarazo, su  sentido emocional  será inestable  y le  parecerá imposible superar  los problemas  pequeños o  solucionar los  grandes, es posible que pase de la alegría a la cólera  sin transición.

Podrá sentirse llena de ánimo y determinación al día siguiente.

El  mejor  consejo que  podemos darle  es  que no  sea exigente consigo  misma;  ni se  fije  objetivos demasiado  difíciles: no trate  de  ser  la  Madre  Perfecta  ni  de  lograr  demasiados progresos durante los primeros días. Establezca   objetivos  razonables  para  cada  día  y  ocúpese solamente de eso.

Entuertos

Los  entuertos se refieren a las contracciones que se presentan en  el útero después del parto/cesárea y sirven para que el útero pueda recuperar su tamaño anterior al embarazo. Estas  contracciones  serán de  mayor  intensidad cada  vez que amamante al bebé.

Todo  esto es una señal excelente  de que todo esta volviendo a la normalidad. Generalmente desaparecen al cabo de 3 a 4 días. Para  este tipo de molestias se le recetan unas tabletas que le ayudaran a disminuirlas.

Sangrado

Existirá  sangrado transvaginal durante cerca  de 4 a 6 semanas después del parto/cesárea.

Este flujo de sangre y mucosidad proviene del útero. Inmediatamente  después  del  parto/cesárea se  presenta  una secreción sangrante  semejante a la menstruación, de color rosado o rojo, y  después de unos cuantos  días adquiere una coloración marrón oscuro  que gradualmente se torna crema hasta llegar finalmente al blanco.

Es  conveniente  utilizar  toallas  sanitarias  como protección (superabsorbentes  los dos primeros días)  y abstenerse de usar tampones hasta después de la segunda semana postparto/postcesárea.

La  lactancia contribuye a la rápida  contracción del útero y a la desaparición del sangrado.

Medicamentos

Al salir del hospital, tu médico te dará una receta la cual va a contener un antibiótico y un analgésico.

El analgésico lo puedes ir espaciando en cuanto vaya disminuyendo las molestias, pero siempre ten a la mano una dosis por si el dolor inicia en la madrugada.

Depresión

Dentro  del  todo  el  mundo  de  felicidad  y  realización que significa  el  nacimiento  de  nuestro  hijo,  se  presenta una peculiar  vivencia  que si  bien es  reconocida o  aceptada por muchas   mujeres,  tiene  una  explicación  tanto  física  como psicológica,  se trata  de la  depresión postparto/postcesárea.  Como ya se dijo  la baja prematura de hormonas genera un cambio en todo el metabolismo orgánico; tanto a nivel físico como psicológico.

Algunos Consejos Útiles:

  • Reconocer y aceptar como “NORMAL” esta depresión postparto/cesárea.
  • Asimilar el hecho de que después de haber sido la protagonista principal durante 9 meses la atención  y los cuidados de todos sus  seres queridos pasará a segundo término, ahora ” ha nacido una  estrella; SU BEBE ” y aun  usted tendrá que dedicarse a Él en cuerpo y alma.
  • Sea permisiva y tolerante y usted misma dese su tiempo, sin angustiarse; procure no estar sola y rodéese de amigas que han pasado por lo mismo y pida explícitamente lo que necesite, si  siente ganas de llorar, no se inhiba, llore, después se sentirá mejor.
  • No se deje presionar por MAMA, SUEGRA, CUÑADAS O HERMANAS ante el hecho del inicio de la lactancia, como ya sabe….
  • Amamante a su bebé (al menos las primeras veces), en privado, sin angustias, ni tensión, sin presionarse a si misma.
  • Cuide la relación  con su  esposo,  háblele de  usted  se sus necesidades  e inquietudes, no se  concrete a comentar sobre el bebé. Quizás  se sienta inquieta  respecto al sexo  y fisonomía de su hijo, si  sus expectativas  se cumplieron  o no, acepte este  hecho y no  piense que es mala  madre por cuestionarse al respecto.

Herida

Ya sea parto/cesárea, tendrás una herida, la cual, tendrás que lavar con agua y jabón todos los días, secar perfectamente y después poner un apósito (protector femenino), para cubrir esta zona.

Se recomienda que utilices una faja calzón.

Es normal que el dolor aumente con movimientos bruscos, pero si se presenta sangrado, secreción fétida o algún líquido acude a tu médico.

 

Intestinos y Vejiga

Es muy importante que tenga evacuaciones blandas y fáciles.

Deberá  evitar  el  estreñimiento;  la  función  intestinal  se normalizará con mayor rapidez si toma más líquidos y camina por su habitación.

En  caso  de  no  presentar  evacuaciones  o  que  se  presente dificultad, se le prescribirá un laxante suave.

Es  posible  que  observe un  aumento  en el  volumen  de orina durante  los primeros días.   Es el  medio del cual  se vale su organismo  para eliminar el exceso de líquido acumulado durante el embarazo.

Alimentación

Es importante que mantengas una dieta con abundantes líquidos entre 1.5 y 2 litros, rica en fibra, sin irritantes ni condimentos, ya que esas sustancias pasan a la leche materna, evita las grasas y aumenta frutas y verduras.

Cuidado de los Senos

Durante los primeros días tendrá que tener ciertos cuidados con sus  senos.  Compre  al menos dos sostenes  de maternidad de la mejor calidad y preste atención rigurosa a la higiene diaria de los  senos y los pezones.  Báñelos todos los días con agua y no utilice  jabón porque éste le quita la  grasa a la piel y puede facilitar el desarrollo de una fisura o una ulceración.

Siempre  trate  sus  senos  con cuidado.    No  los  frote para secarlos; séquelos con pequeños golpes de la toalla.

Después  de amamantar, si es posible,  deje los pezones al aire un  rato.  Utilice protectores  debajo del sostén para absorber la   leche  que  pueda  salir  y  cambie  los  protectores  con frecuencia.   No deje nunca un protector húmedo en contacto con el  pezón.  Para evitar que  se formen fisuras en los pezones, aplique  una gota de aceite o crema (aceite de oliva o crema de caléndula)  sobre el protector.   Para evitar una infección, aplique un antiséptico atomizado antes de amamantar.

Sugerencias para Amamantar:

  • Tómese el tiempo que necesite para prepararse para amamantar.
  • Busque un lugar cómodo y tenga listo y  a la  mano lo que    pueda necesitar.
  • Si los  senos se llenan de leche poco después de haber amamantado, extraiga un poco de leche (con un tira leche)
  • Si los senos están llenos y endurecidos, el pezón se aplanará y el bebé tendrá dificultad para aferrase a él. Extraiga un poco de leche para ablandar la areola y cuando la leche salga el bebé comenzará a succionar.
  • Para aliviar la congestión  de los  senos, aplique compresas calientes o frías, y con un masaje suave haga fluir la leche.
  • Si le aparecen fisuras o grietas, extraiga la leche del seno ulcerado hasta que la piel sane. Dé al bebé la leche con una cuchara si no desea molestarse con biberones o esterilización.
  • Si el bebé  rechaza el seno es quizás  porque experimenta dificultar  para respirar.  Oprima la  punta del seno con los dedos para dejar espacio libre para la nariz del bebé.
  • Si siente calor y  observa un parche rojo  y brillante en el  seno,  consulte a su  médico.  Puede  tratarse de un conducto obstruido.
  • No recurra nunca al biberón mientras se pueda prescindir de él. El llanto del niño en los primeros días no le perjudica: al contrario, le es muy útil para el desarrollo de los pulmones. No debe, pues, calmarle con el biberón.
  • No desanimarse con demasiada prontitud, pues el niño, aunque llore, resiste mucho, y más debe resistir la madre.
  • Estimule suficientemente el pecho cuando la leche empiece a fluir. Si ofrece el biberón a su hijo durante los tres o cuatro primeros días, usted merma las posibilidades de poderlo criar al pecho, pues el niño, satisfecho con sus biberones, no hará ningún esfuerzo para mamar.

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Hay 4 posiciones principales para amamantar: acunado, acunado cruzado, pelota de fútbol y acostado.

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Acunado

La posición más común es la de acunado. Esto es cuando se sienta con su bebé en la falda y le coloca la cabeza donde dobla el brazo. El pecho del bebé debe estar contra su propio pecho para que no tenga que voltear la cabeza para llegar al pezón. El brazo de la silla tiene que estar colocado a la altura correcta para poder apoyar su brazo. Use almohadas para dar soporte a la espalda, el brazo y la cabeza del bebé. También puede usar un banco de pie para ayudarle a elevar las piernas.

Pelota de fútbol

Coloque al bebé de manera que las piernas queden debajo de su brazo. Sostenga al bebé como una pelota de fútbol americano colocada a lo largo de su antebrazo, con el cuerpo sobre el brazo y la cara mirando el seno. Use su otra mano para apoyar el seno. La posición de pelota de fútbol es útil si tiene los senos agrandados o los pezones irritados. También es una buena posición si tuvo una cesárea y no puede colocar el bebé sobre el estómago. Si tiene tendencia a que se le tapen los conductos de la leche, la posición de pelota de fútbol puede ser buena porque ayuda al bebé a vaciar los conductos inferiores. ¡También es una buena posición para amamantar a mellizos!

Acostado

Amamantar acostada es útil para alimentar al bebé de noche. Acuéstese de costado y coloque al bebé a su lado frente a usted, con la cabeza a la altura de su seno. También le conviene colocar un par de almohadas en la espalda para tener apoyo adicional. Asegúrese que el bebé pueda respirar por la nariz.